Si hay una historia de amor bella esa es la de
Cyrano de Bergerac. Él no era un hombre a una
nariz pegado, era un hombre
enamorado y su amor era profundo y verdadero, dónde lo único que cuenta es la felicidad del ser amado por encima de cualquier cosa.
Le he dedicado este cartel a mi parte favorita del libro de
Edmond Rostand para poder imprimirlo en mi pared y leerlo cada día. Para hacer la ilustración he jugado con el carácter de Cyrano, audaz y descarado.
Si sabes de algún verso increíble que pueda inspirar un buen cartel no dudes en compartirlo!